paf!

Extraño, demasiado !

cómo para no caer de boca

al cemento , a vuestros ojos

y a tú inquietud.

Ni con los analgésicos

logró dormir

me raptaste

te pedí un tiro

justo ahí,

el surgimiento de tu respuesta,

fue una inútil tentación

sigo igual

pegada al cemento

y a vuestros ojos,

temiendo la entrada del pánico

y de mi vuelo.

por aquí

por allá

por aquel lugar

y por mis sitios antojadizos

busco manos para

equilibrio

está pesada la cosa ahora!

creo que lo sabes,

te pones torpe y chistoso

que mejores síntomas,

tal vez gravedad

para el revoltijo

de mis pasiones.

Ni con la ausencia

ni con el descontrol

la música termina

de evacuar

la corriente,

no se puede terminar así como así

con el cartón de reconocimiento

de eslabones caminados

y de ojos ya seducidos.

Te invité , en tiempos en los que todavía tú no conocías las sílabas y en lo que me encontraba en la membrana de la oruga.